Familia - Felidae | Publicado - Febrero 2020
El ratel (Mellivora capensis), es una especie de mamífero de la familia de Mustelidae originario de África, la India y Oriente Medio, se le conoce también por los nombres de tejón meleno o tejón de la miel, este animal carnívoro es la única especie de su género.
Es de cuerpo robusto y alargado, mide algo más de 80 cm de longitud y 30 cm de alto, los machos son algo más grandes que las hembras llegando a los 15 kilos y 9 respectivamente, su cabeza es alargada y sus patas cortas pero fuertes, con uñas preparadas para escavar, su cola es bastante corta. Su pelaje es de color gris en cabeza, cuello, dorso y cola, tornando al color negro en la parte inferior, entre ambas zonas existe una línea muy clara, casi de color blanco.
La dieta del tejón de la miel pasa desde grandes presas hasta la carroña, pero de todos ellos su preferido siempre es la miel de las colmenas, esto le trae problemas en muchas ocasiones con los apicultores. Por norma general es un animal carnívoro que devora cualquier animal a su alcance incluyendo roedores, aves, insectos, lagartos tortugas, ranas y serpientes.
Su alimentación es muy variada incluyendo en ella bayas, raíces y bulbos, para cazar roedores excava y acorrala a estos dentro de sus madrigueras, son capaces de alimentar también de tortugas gracias a sus fuertes mandíbulas, también pueden matar tanto a las serpientes venenos, como a serpientes de gran tamaño, como la pitón o la boa, hay registros de tejones comiéndose a pitones de hasta 3 metros de longitud. Devoran todas las partes de sus presas incluyendo la piel, pelo, plumas, carne y huesos.
Son famosos por su dureza, pero no son indestructibles, ya que leones y leopardos los cazan habitualmente. Los rateles son considerados el paradigma de la ferocidad, ya que hacen reflejo de ella a cada momento, son tenaces, resistentes y valientes ya que nunca dejan escapar una presa. En el año 2002 fue incluido en el Libro Guinness de los récords como: "most fearless animal in the world" (el animal más valiente del mundo).
Al comenzar el otoño el tejón acumula follaje tierno, para forrar la cueva en la que hibernará. Las cuevas excavadas por las hembras son aumentadas por las generaciones sucesivas, hasta que se convierten en colonias de numerosas familias matriarcales. El animal solo vive doce años; las cuevas duran siglos.
Cuando sale de su letargo hibernal, trata de recuperarse de la debilidad causada por tan prolongado ayuno. En esa época, la miel es uno de los alimentos que proporcionan una recuperación rápida. Para obtenerla, el tejón invade y destruye las colmenas. Las abejas, enfurecidas, nada pueden hacer para detenerlo, pues no consiguen picarlo a través del pelo.
Los machos adultos viven de forma solitaria, las hembras conservan a sus cachorros cerca de sí durante dos o tres años, aun cuando ya son capaces de cazar solos, con varios meses de edad, excavan sus cubiles cerca de la cueva materna, a veces comunicados por galerías. Después de alcanzar la madurez sexual, los machos van a vivir en cuevas individuales, pero las hembras generalmente continúan en la colonia, donde permanecen los cachorros. Es una colectividad que está formada solamente por las hembras y los cachorros.
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