Oso polar

Familia - Pandionidae | Publicado - 27/04/2020

Ursus maritimus o como se le conoce comúnmente, el oso polar u oso blanco, es una especie de mamífero del orden de los carnívoros, que pertenece a la familia Ursidae, su hábitat natural está localizado en las zonas árticas del hemisferio norte y tiene el honor de ser el carnívoro terrestre de mayor tamaño de todo el planeta.

Entre los miembros de la familia Ursidae solo el oso Kodiak se puede comparar en envergadura al oso polar, siendo el segundo el de mayor tamaño. Antiguamente al oso polar se le conocía por el nombre científico de Thalarctos maritimus, nombre que fue cambiado por Ursus maritimus, que es como se le conoce en la actualidad.

Los machos de oso blanco cuando llegan a su edad adulta tienen un peso que ronda entre los 400 y los 680 kg, aunque hay datos de ejemplares que han llegado a pesar hasta más de 1.000 kg, y sobrepasan los 2,5 metros de largo.

Las hembras suelen ser más pequeñas y menos pesadas que los machos, por norma general tienen un peso que suele ser la mitad que el de los machos, pero cuando están embarazadas y acumulan grasa antes del parto, pueden rodar entre los 350 y los 500 kg, en cuanto a su envergadura suelen rondar los 2 metros de largo.

El oso blanco estéticamente es más alargado que el resto de los miembros de su familia también tiene sus patas más desarrolladas para caminar y nadar durante distancias muy largas, sus orejas y su cola son de tamaño reducido, un detalle que le ayuda a mantener mejor su calor corporal, esto es algo común en los mamíferos árticos.

Son animales preparados a la perfección para las duras temperaturas de las zonas árticas de nuestro planeta, para ello están provistos de una gruesa capa de grasa subcutánea y un denso pelaje, que, aunque para muchos parezca blanco, nada más lejos de la realidad, son traslucidos, el pelaje del oso polar está formado por miles de pelos huecos, que al estar llenos de aire se convierte en un aislante térmico perfecto.

Baja el pelaje del oso polar se encuentra la piel, que es de color negro para así atraer de una mejor manera la radiación solar, y con ello también aumentar el calor corporal, la luz que se refleja en su pelaje genera una falsa sensación de blancura, aunque en ocasiones puede verse en algunas zonas con un tono amarillento o pardo claro.

La pérdida de calor corporal se ve muy disminuida gracias a la espesura de su pelaje, el color de su dermis y por un espeso panículo adiposo que se encuentra bajo su piel, en la época de más calor los osos polares sufren un gran adelgazamiento y al tener los músculos densamente vascularizados consiguen irradiar el exceso de temperatura en su cuerpo.

En el periodo de apareamiento es el único tiempo en que se puede ver a un macho y una hembra de esta especie juntos, durante el resto de la temporada suelen ser animales bastante solitarios, los osos polares se aparean entre los meses de abril y mayo.

Aunque el Ursus maritimus se aparea en los meses de abril y mayo, sus óvulos no se fertilizan hasta el mes de septiembre, tiempo que será cuando comience también a desarrollar en el interior de las hembras, este fenómeno se conoce por el nombre de implantación diferida.

Durante el tiempo que se reproducen hasta que comienza a fertilizar el ovulo, la hembra aprovechará para ganar toda la cantidad de grasa corporal que le sea posible, ya que luego durante el embarazo necesitará de la mayor cantidad posible.

La gestación en los osos polares en increíblemente corta, ya que las crías nacen en el mes de octubre, al nacer son totalmente dependientes de sus madres, ya que nacen ciegas, sin dientes, con una altura de 30 cm y un peso de apenas 700 g. En los siguientes 5 meses deberán crecer rápidamente para cuando llegue el verano puedan mantener el ritmo de viaje de su madre.

A la llegada del verano las crías se mantendrán junto a su madre durante un tiempo de 5 meses más, que aprovecharán para aprender métodos de caza, y a la vez gozarán de la protección de ella, contra ataques de otros depredadores, siendo los de mayor peligro machos adultos de osos polares.

Algunas crías pueden estar hasta 2 o 3 años con sus madres, pero es algo más inusual, teniendo en cuenta que un oso llega a su edad adulta sexualmente hablando a los 3 o 4 años, pudiendo a llegar a vivir un máximo de 30 años.

El oso polar es el único superdepredador del Ártico, y como tal se alimenta de un gran número de animales de la región polar ártica, pudiendo comer al día más de 30 kg los adultos y las crías hasta 1 kg, una característica de estos animales es que no beben agua, ya que dentro de su hábitat es acida o salada.

Los osos blancos sacan los fluidos que necesitan de la sangre al comer a sus presas, como dije anteriormente, los osos polares son el mayor riesgo para otros miembros de su familia, ya que en tiempos de escasez no dudarán en alimentarse de alimentarse de otros osos polares, especialmente de osos jóvenes.

Estos animales han sido cazados durante generaciones por pueblos árticos como los esquimales, ya sea por su carne, siempre evitando comer el hígado ya que es muy tóxico para el ser humano, o por la buena calidad de su piel, con las que hacerse prendas y resguardarse con ellas del frío.

Entre los mayores peligros que tiene los osos polares, como para muchas otras especies es el ser humano el causante de que se encuentre en serio peligro de extinción, ya sea por el cambio climático, o por la caza indiscriminada que han sufrido estos animales hasta hace poco tiempo.

Cabe destacar que los osos polares tienen un grado máximo de protección en todas las regiones donde habita, solo estando permitido su caza en la región de Canadá a la tribu de los Inuit con un número limitado de ejemplares al año, en el año 2010 se permitió a poblaciones indígenas de Estados Unidos y Rusia cazar un máximo de 29 ejemplares entre ambos países, pero en la actualidad Rusia prohíbe completamente la caza de estos animales dentro de todo su territorio.

En cuanto a otros animales salvajes los osos blancos solo tienen que temer a las morsas, o a otros osos polares como ellos, las morsas los pueden herir gravemente con sus colmillos cuando se defienden para no ser devoradas, de miembros de su especie solo debe preocuparse generalmente cuando son jóvenes.

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