Acrantophis madagascariensis
Familia - Boidae | Publicado - 27/12/2020
Acrantophis madagascariensis o como se la conoce peculiarmente, Boa terrestre de malgache es una serpiente endémica de Madagascar, siendo la de mayor tamaño que podemos encontrar en toda la isla, se extiende por toda la zona norte en una gran variedad de hábitats ya sea en bosques tropicales como en otras zonas más secas.
Como dice su nombre es una especie originaria de la isla de Madagascar, siendo posible encontrarla en un gran lugar de zonas, excepto en grandes altitudes, es común poder encontrar a la Boa de tierra malgache enroscada en las ramas de los árboles a la espera de dar caza a sus presas.
La Boa malgaches un animal nocturno que durante el día tiende a permanecer escondida bajo el suelo, también es muy habitual que se oculten bajo las hojas que han caído de los árboles, que gracias al color de su piel le sirven de un perfecto camuflaje.
Existen dos variaciones de la Boa de tierra malgache de la misma especie de dos colores diferentes, la primera de ellas es de color verde a verde grisáceo, la cual se encuentra en zonas de cordilleras y es la más abundante.
La segunda de ellas es de color amarillo y anaranjado, aunque en la zona oeste de la isla de Madagascar se puede encontrar algunos individuos de color marrón claro con manchas de color marrón oscuro.
La longitud media de estos reptiles ronda los 2,5 metros en su edad adulta, aunque se han visto casos que han superado ampliamente los 3 metros de longitud. Al igual que todas las constrictor son serpientes robustas y poderosas.
La Acrantophis madagascariensis es una serpiente como dije anteriormente de costumbres nocturnas, que aprovecha la oscuridad de la noche para cazar a sus presas, que son generalmente pequeños mamíferos y aves, los cuales localiza gracias a los orificios que tiene alrededor de su boca, los cuales son sensibles al calor.
Gracias a sus sensores de color la boa puede localizar a presas de sangre caliente incluso en total oscuridad, una vez captura a su presa las retiene con su cuerpo el cual se va enroscando, restringiendo con ello el flujo de sangre al corazón, has que le causa una insuficiencia circulatoria.
La boa de Madagascar no es una serpiente venenosa, por lo que suele resultar inofensiva para el ser humano, entre sus presas preferidas encontramos a pequeños roedores, musarañas, erizos, lémures y algunas aves de pequeño tamaño.
La reproducción de la Boa de Madagascar es un tanto peculiar, cuando llega su época de apareamiento la hembra comienza a segregar feromonas para atraer la atención de los machos, antes de la copula el macho se deslizará repetidas veces por el cuerpo de la hembra para estimular sus espolones.
Gracias a ello la hembra comenzara a ovular y tendrá lugar la cópula, tras ello la hembra aumentara su nivel de melamina y con ello cambiara el color de su piel, pasando a ser de un tono más oscuro, tras ello la gestación durará entre cuatro y seis meses.
Tras el estado de gestación la hembra dará a luz entre diez y doce crías, las cuales son de color rojo y tienen una longitud de tan solo 25 cm, durante su primer año de vida la Acrantophis madagascariensis ira obteniendo los colores característicos de los ejemplares adultos.
En la actualidad la Boa de tierra malgache de Madagascar se encuentra amenazada por la destrucción de su hábitat natural, también son consumidas por personas de origen chino y su piel es usada para productos de cuero, pese a todo está catalogada con una preocupación menor por la Unión Internacional de Conservación para la Naturaleza (UICN).
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